Ver

(Mateo 9,29: Jesús les tocó los ojos, diciendo: «Que suceda como ustedes han creído»)
¿Cómo puede ser que, si ver deseo,
quiera ver tu luz sin buscarla nunca?
¿Y cómo pretende ver quien no busca
a la verdadera luz con anhelo?

Señor, quiero ver porque nada veo;
sin tu luz, todo está en tiniebla obscura,
pues si no estás, la claridad se oculta,
y cuanto creemos ver, no lo vemos.

Hijo de David, suplicante vengo,
con esperanza, procurando ayuda;
albergo confianza, ninguna duda
que, si tú quieres, ahora ver, yo puedo.

Amén.