Lectura orante del Evangelio del Jueves de la Semana 17 del Tiempo Ordinario: Mateo 13,47-53


El Espíritu Santo, que das cuando se te pide, necesitamos ahora, Señor, los que nos disponemos a orar tu Palabra de este día; para que nuestras mentes y nuestros corazones se dispongan a recibir y acoger el mensaje que nos comunicas hoy con el Evangelio diario, y para que lo convirtamos en obra en nuestra vida, contagiando a un mundo necesitado de ti. Amén.

1. Lectura

a) Texto del día

Mateo 13,47-53: En aquel tiempo, Jesús dijo a la gente: «También es semejante el Reino de los Cielos a una red que se echa en el mar y recoge peces de todas clases; y cuando está llena, la sacan a la orilla, se sientan, y recogen en cestos los buenos y tiran los malos. Así sucederá al fin del mundo: saldrán los ángeles, separarán a los malos de entre los justos y los echarán en el horno de fuego; allí será el llanto y el rechinar de dientes. ¿Habéis entendido todo esto?» Dícenle: «Sí». Y Él les dijo: «Así, todo escriba que se ha hecho discípulo del Reino de los Cielos es semejante al dueño de una casa que saca de sus arcas lo nuevo y lo viejo». Y sucedió que, cuando acabó Jesús estas parábolas, partió de allí.

b) Contexto histórico y cultural

Concluyen, con este pasaje, las parábolas que el evangelista Mateo ha agrupado en el capítulo 13 de su redacción evangélica, referentes al Reino de los Cielos, formuladas a orillas del lago, o mar de Galilea, a sus seguidores.

2. Meditación (para leer lenta y pausadamente; deteniéndose a meditar y saborear cada palabra, cada verso y cada estrofa, relacionándolos con el Evangelio del día y con nuestra vida)

Ayúdame a ser de los justos

Ayúdame a ser de los justos,
Señor, ahora, antes del cernido,
así no seré dirigido
al fuego para los injustos.

No es sólo un asunto de susto
por ese perenne castigo
al lado del malo enemigo
y eternos llantos de disgusto;

es por no perder ni un segundo
del amor que me ofreces, Cristo,
y que a tu lado yo conquisto
si te elijo a Ti ante el mundo.

¡Quiero ya ese premio futuro!
hazme vivirlo desde ahora;
acompáñame a toda hora,
sólo así lo obtengo seguro.

Amén.

3. Oración

Aunque no había venido antes

Aunque no había venido antes,
hoy vengo a decir presente
ya que Tú eres el docente
y oí que iniciaste las clases.

Inscríbeme en kindergarten,
si no hay cupo, como oyente,
pero no quiero perderme
de ser tu alumno y salvarme.

Amén.

4. Contemplación (en un profundo silencio interior nos abandonamos por unos minutos de un modo contemplativo en el amor del Padre y en la gracia del Hijo, permitiendo que el Espíritu Santo nos inunde. En resumen, intentamos prolongar en el tiempo este momento de paz en la presencia de Dios).

5. Acción

A asumir las enseñanzas de Jesús
se me invita en el día de hoy;
¡tu alumno soy,
instrúyeme Señor!
Amén.