El respeto a su casa

(Marcos 11,17: Mi Casa será llamada Casa de oración para todas las naciones. Pero ustedes la han convertido en una cueva de ladrones)
El respeto a su casa,
que Él ha hecho mía,
Jesucristo pedía
y hoy me lo recalca.
¡Ven acá y restaura!
dijo a san Francisco;
y hoy me dice lo mismo:
¡ven cuídala sin pausa!

Amén.