(Mateo 5,13: Ustedes son la sal de la tierra. Pero si la sal pierde su sabor, ¿con qué se la volverá a salar? Ya no sirve para nada, sino para ser tirada y pisada por los hombres)
Como un gran farol encendido
sobre una montaña de sal,
se nos está pidiendo actuar,
de Cristo, siendo los testigos;
salar y dar sabor, sentido,
toda la tierra sazonar;
dar nuevo gusto al paladar
siendo todos bien compasivos.
También que seamos los bombillos,
faroles en la obscuridad;
y que al mundo pueda llegar
toda luz que emana de Cristo.
Amén.
sobre una montaña de sal,
se nos está pidiendo actuar,
de Cristo, siendo los testigos;
salar y dar sabor, sentido,
toda la tierra sazonar;
dar nuevo gusto al paladar
siendo todos bien compasivos.
También que seamos los bombillos,
faroles en la obscuridad;
y que al mundo pueda llegar
toda luz que emana de Cristo.
Amén.