(Marcos 7,15: Ninguna cosa externa que entra en el hombre puede mancharlo; lo que lo hace impuro es aquello que sale del hombre)
para poder desintoxicarme;
a ver si consigo que paren
mis tantas acciones funestas.
No importa tanto la ingesta,
porque es lo que de mí sale
que el Señor quiere que sane
para que mi mente esté quieta
Por tanto, la dieta es inversa,
pues es ayunar las maldades
con todas mis perversidades;
y así mi corazón tendrá fiesta.
Amén.
Amén.