Lectura orante del Evangelio del Miércoles de la Semana 5 del Tiempo Ordinario: Marcos 7,14-23


Que tu Santo Espíritu nos auxilie en este momento, Señor, en que vamos a orar con tu Palabra, para poder entenderla adecuadamente y aplicarla en nuestra vida. Amén.

1. Lectura

a) Texto del día

Marcos 7,14-23: En aquel tiempo, Jesús llamó a la gente y les dijo: «Oídme todos y entended. Nada hay fuera del hombre que, entrando en él, pueda contaminarle; sino lo que sale del hombre, eso es lo que contamina al hombre. Quien tenga oídos para oír, que oiga».

Y cuando, apartándose de la gente, entró en casa, sus discípulos le preguntaban sobre la parábola. Él les dijo: «¿Así que también vosotros estáis sin inteligencia? ¿No comprendéis que todo lo que de fuera entra en el hombre no puede contaminarle, pues no entra en su corazón, sino en el vientre y va a parar al excusado?» —así declaraba puros todos los alimentos—. Y decía: «Lo que sale del hombre, eso es lo que contamina al hombre. Porque de dentro, del corazón de los hombres, salen las intenciones malas: fornicaciones, robos, asesinatos, adulterios, avaricias, maldades, fraude, libertinaje, envidia, injuria, insolencia, insensatez. Todas estas perversidades salen de dentro y contaminan al hombre».

b) Contexto histórico y cultural

Luego de una confrontación con fariseos y escribas llegados de Jerusalén, acerca de la omisión del rito de purificación en la limpieza de las manos por parte de los discípulos de Jesús, éste se dirige a la gente y les habla en lenguaje parabólico con el texto del pasaje de hoy, referente a cuál es la contaminación que realmente debe preocupar.

2. Meditación (para leer lenta y pausadamente; deteniéndose a meditar y saborear cada palabra, cada verso y cada estrofa, relacionándolos con el Evangelio del día y con nuestra vida)

Tengo que hacer una dieta

Tengo que hacer una dieta
para poder desintoxicarme;
a ver si consigo que paren
mis tantas acciones funestas.

No importa tanto la ingesta,
porque es lo que de mí sale
que el Señor quiere que sane
para que mi mente esté quieta

Por tanto, la dieta es inversa,
pues es ayunar las maldades
con todas mis perversidades;
y así mi corazón tendrá fiesta.

Amén.

3. Oración

Te pido me ayudes, Señor,
a limpiar mi corazón;
que el detergente de tu amor
lave mi interior;
y que yo pueda asemejarme a ti
en cada acción.
Amén.

4. Contemplación (en un profundo silencio interior nos abandonamos por unos minutos de un modo contemplativo en el amor del Padre y en la gracia del Hijo, permitiendo que el Espíritu Santo nos inunde. En resumen, intentamos prolongar en el tiempo este momento de paz en la presencia de Dios).

5. Acción

A la pureza,
de pensamiento y de acción,
estoy invitado hoy;
aceptar esa invitación
tiene que ser mi obrar en este día.
Amén.