(Del sacerdote, periodista y escritor español José Luis Martín Descalzo (1930-1991))
con una oscura cortina enrojecida,
beso y mentira hicieron su guarida
y la falsa sonrisa su mercado.
¿Y Vos entráis en ella, descuidado,
en la boca del lobo? ¡Ved, mi vida,
que vais a ser, pues que perdí mi brida,
Dios en boca de un hombre desbocado!
¡Y si, al menos, locura hubiera sido
mi loco desbocarme! Pero lleno
de vacíos estoy, y he convertido
tu espuela, ¡oh Dios!, ¡tu roja espuela!, en frenos.
¡Mas arda en mi tu Pan, y habré vivido
loco de amor y desbocado al menos!