¡Alégrate, zagala!
¡Alégrate, pastor!
Ha nacido Jesús,
es nuestro Redentor.
Ha nacido Jesús,
que pena, en un establo,
sin más luz que su luz,
sin más sol que sus manos.
Sin más luz que sus ojos,
nació el Crucificado,
nació el Rey de la Paz,
nació el Cordero Blanco.
Igual los pastores
que los Reyes Magos,
doblan sus rodillas
y beben cantando.
Y beben la paz
de sus ojos claros.
El frío no quiere
entrar al establo