Otro natalicio

(Salmo 90,10: Nuestra vida dura apenas setenta años, y ochenta, si tenemos más vigor: en su mayor parte son fatiga y miseria, porque pasan pronto, y nosotros nos vamos)
En natalicio una introspección;
el huracán interno en la cabeza
a filosofar un poco ahora empieza
produciendo un coctel de reflexión;
de espíritu, agridulce libación
escudriñadora de la conciencia.

¿Juventud? Vano es malgastar su fuerza;
la da Dios cuando se requiere acción
para poder disfrutar su creación
que siendo infinita es, por tanto, inmensa;
pero el tiempo agota cuando aún empieza,
y desearemos, del tiempo, extensión.

¿Vejez? darla es, de Dios, atribución;
privilegio de unos, quizás por ciencia;
de Dios, manifestación de paciencia:
chance para la rectificación,
que, de todos, es justa aspiración
para alcanzar, del Señor, indulgencia.

Hay quien en un día como este ni reza,
tal vez mucha o poca preocupación;
pero es tiempo para la evaluación:
reconocer del Señor su grandeza,
quizás tomar un vaso de cerveza
y agradecer la vida como un don.

Amén.