¡Con María mediante!

(Juan 19,27a: Luego dijo al discípulo: «Aquí tienes a tu madre»)
Después de pedir a Jesús,
con un Rosario a María
se hace expedita la vía
más rápida que un obús
pues adicionaste un buen plus:
de la oración, ayudante,
que actúa como lubricante
que facilita tu ruego
y le incrementa su fuego.
¡A orar, con María mediante!

Amén.