Mucho y buen fruto produzca

(Mateo 13,3: Entonces él les habló extensamente por medio de parábolas. Les decía: El sembrador salió a sembrar...)
Que mucho y buen fruto produzca
mi vida, que es tuya, Señor;
que siempre a tu Palabra acuda,
pues fértil semilla es de amor,
y que yo pueda con su ayuda
fructificar mi corazón.

Amén.