Sigue eligiendo a Dios

(De "La voz interior del amor" por Henri Nouwen)

Estás permanentemente frente a alternativas. La cuestión es si optas por Dios o por tu propio ser indeciso. Sabes cual es la opción correcta, pero tus emociones, pasiones y sentimientos te sugieren permanentemente que optes por la vía del autorrechazo.

La opción radical es confiar en que, en todo momento, Dios estará contigo y te dará lo que más necesites. Tus emociones de autorrechazo pueden decir: “No va a funcionar. Aún siento la misma angustia que sentía hace seis meses. Probablemente vuelva a caer en los viejos patrones depresivos de acción y reacción. No he cambiado de verdad.” Y así sucesivamente. Es difícil no escuchar estas voces.

Aún así, sabes que estas palabras no representan la voz de Dios. Dios te dice: “Te amo, estoy contigo,
quiero verte acercarte a mi y experimentar la dicha y la paz de mi presencia. Quiero darte un nuevo corazón y un nuevo espíritu. Quiero hablar con mi boca, ver con mis ojos, escuchar con mis oídos, tocar con mis manos. Todo lo mio es tuyo. Sólo confía en mi y déjame ser tu Dios”.

Esta es la voz que tienes que escuchar. Y esta escucha requiere una verdadera elección, no una para un rato, sino para todo momento del día y de la noche. Eres tú quien decide que pensar, decir y hacer.

Puedes pensar tú mismo en una depresión, puedes hablar tú mismo de una baja autoestima, puedes actuar mostrando autorrechazo. Pero siempre tienes una posibilidad de pensar, hablar y actuar en nombre de Dios, a fin de avanzar hacia la Luz, la Verdad y la Vida.

Al concluir este periodo de renovación espiritual, una vez mas te enfrentas a una decisión. Puedes optar por recordar este momento como un intento fallido de renacer por completo, o puedes optar por recordarlo como el muy valioso momento en que Dios comenzó a hacer cosas nuevas en ti que deben ser completadas.

Tu futuro depende del modo en que decidas recordar tu pasado. Opta por la verdad de lo que sabes. No dejes que tus emociones, aun ansiosas, te distraigan. Mientras sigas eligiendo a Dios, tus emociones cesaran gradualmente en su oposición y se convertirán a la verdad en ti.

Estás enfrentando una verdadera batalla espiritual. Pero no temas. No estás solo. Quienes te han guiado durante este periodo no te van a dejar. Sus plegarias y su apoyo estarán contigo dondequiera que vayas. Consérvalos cerca de tu corazón para que puedan guiarte a medida que vas tomando decisiones.

Recuerda que estás a salvo. Eres amado. Estás protegido. Estás en comunión con Dios y con quienes te han sido enviados por Dios. Lo que es de Dios ha de perdurar. Pertenece a la vida eterna. Opta por eso, y sera tuya.