Lectura orante del Evangelio del Domingo (Ciclo A) de la Semana 23 del Tiempo Ordinario: Mateo 18,15-20


De tu Espíritu

De tu Espíritu, Señor,
pedimos la efusión
en esta oración
con tu Palabra de hoy;
que Él sea el instructor
que nos dé comprensión,
y a nuestro corazón
la buena intención
de vivirla con ardor
hasta la salvación.

Amén.

1. Lectura

a) Texto del día

Mateo 18,15-20: En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: «Si tu hermano llega a pecar, vete y repréndele, a solas tú con él. Si te escucha, habrás ganado a tu hermano. Si no te escucha, toma todavía contigo uno o dos, para que todo asunto quede zanjado por la palabra de dos o tres testigos. Si les desoye a ellos, díselo a la comunidad. Y si hasta a la comunidad desoye, sea para ti como el gentil y el publicano. Yo os aseguro: todo lo que atéis en la tierra quedará atado en el cielo, y todo lo que desatéis en la tierra quedará desatado en el cielo. Os aseguro también que si dos de vosotros se ponen de acuerdo en la tierra para pedir algo, sea lo que fuere, lo conseguirán de mi Padre que está en los cielos. Porque donde están dos o tres reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos».

b) Contexto histórico y cultural

En esta sección del Evangelio según San Mateo, Jesús trata aspectos eclesiales, que se refieren a las relaciones entre los miembros de la Iglesia, la comunidad que Él está formando, y que debe subsistir en el tiempo enfrentando la principal problemática del hombre: el pecado; la adecuada corrección fraterna es un elemento importante a tener en cuenta.

2. Meditación (para leer lenta y pausadamente; deteniéndose a meditar y saborear cada palabra, cada verso y cada estrofa, relacionándolos con el Evangelio del día y con nuestra vida)

A ti que eres mi hermano

A ti que eres mi hermano:
cuando el camino dejo,
corrígeme si peco;
hazlo con algún tacto
a solas, a mi lado,
sin ese tono seco;
y si yo no enderezo
mi rumbo equivocado,
a quien le sale caro
es a mi, porque pierdo
a un amigo bueno
que ha hecho lo mandado.

Amén.

3. Oración

Con nosotros estás

Con nosotros estás,
te sentimos, Señor;
presides la reunión;
lo que oremos harás,
si tenemos piedad;
te pedimos amor
al hacer corrección
y, en tu Nombre, unidad.

Amén.

4. Contemplación (en un profundo silencio interior nos abandonamos por unos minutos de un modo contemplativo en el amor del Padre y en la gracia del Hijo, permitiendo que el Espíritu Santo nos inunde. En resumen, intentamos prolongar en el tiempo este momento de paz en la presencia de Dios).

5. Acción

A estar dispuesto y aceptar
la corrección fraterna,
la de mi hermano y la mía,
se me invita en este día;
también a la unidad en Cristo;
son mis acciones,
con tu ayuda, Señor.
Amén.