Mala lluvia

(Del español Ramón de Garciasol (nombre literario de Miguel Alonso Calvo (1913-1994)))
¡Si lloviese sobre alegría!
Pero llueve sobre mojado,
sobre el corazón entelerido,
sobre tiempo de melancolía
—el amor en el suelo, derribado—,
sobre el entusiasmo escarnecido.
Si lloviese sobre la cara
juvenil, y sobre los ojos
llenos de risa, sobre el paso
caminero, y no se alocara
la corriente con muertos, los rastrojos
con pedrisco, los vientres con fracaso.
Si lloviese como Dios manda,
para la tierra y las cosechas,
para el viñedo y el olivo,
no para el cauce que se desmanda,
no para enrobinar las flechas,
no para emborronar lo que escribo.
Llueve, Señor, y llévatelo todo
lo que no tenga cepellón eterno,
lo que no cante amor en las raíces.
Llueve, Señor, y llueve más, a modo;
respeta solamente lo materno,
lo que tiene futuro en las matrices.
Bórrame si soy llanto, si soy humo,
hasta dejarme a flor de sol el hueso;
arrástrame este fango de la queja,
pisa mi pulpa extrema para zumo,
estrújame la sangre para beso,
rotúrame la entraña con tu reja.