Conviértete hoy

(De los Comentarios a los Salmos por san Agustín)
No digas, pues:
«Mañana me convertiré, mañana contentaré a Dios,
y de todos mis pecados pasados y presentes quedaré perdonado».
Dices bien que Dios ha prometido el perdón al que se convierte;
pero no ha prometido el día de mañana a los perezosos.