Padre nuestro que estás en el cielo,
tú nos has dado un modelo de vida
en la Sagrada Familia de Nazaret.
Ayúdanos, Padre amantísimo,
a hacer de nuestra familia
un nuevo Nazaret donde reine la alegría y la paz.
Que sea profundamente contemplativa,
intensamente eucarística y vibrante de gozo.
Ayúdanos a permanecer unidos
en los gozos y en las penas
gracias a la oración familiar.
Enséñanos a reconocer a Jesús
en cada miembro de nuestra familia,
particularmente cuando sufre y está herida.
Que el Corazón eucarístico de Jesús
haga nuestros corazones suaves y humildes, semejantes al suyo (Mt 11,29).
Ayúdanos a cumplir santamente nuestra vocación familiar.
Que nos podamos amar los unos a los otros
como Dios nos ama a cada uno cada día más,
y nos perdonemos mutuamente nuestras faltas
así como tú perdonas nuestros pecados.
Ayúdanos, Padre amantísimo,
a acoger todo lo que nos das
con una amplia sonrisa.
Corazón inmaculado de María, causa de nuestra alegría, ora por nosotros.
Santos ángeles de la guarda,
permaneced junto a nosotros,
guiadnos, protegednos.
Amén.