Rocío y perfume

(Lucas 6,45b: de la abundancia del corazón habla la boca)
Rocío y perfume,
Señor, dale a mi habla;
el palo o la tabla,
te pido, se esfume;
que a nadie yo abrume
con verbo que endiabla
por su rajatabla.
¡Mi voz amor sume!

Amén.