Pon tus mandatos en mi corazón

(Juan 14,15: Si ustedes me aman, cumplirán mis mandamientos)
Pon tus mandatos en mi corazón,
con extensiones allá hasta mi mente
para que integren hasta el subconsciente,
Señor, y cumplirlos sin condición.

No sea obedecer por obligación,
sino necesidad que el ser siente
de corresponder, siendo consecuente,
amándote a Ti que me has dado amor.

Amén.