Él te nombró piedra

(Mateo 16,18: Y yo te digo: Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi iglesia, y el poder de la Muerte no prevalecerá contra ella)
Él te nombró piedra,
como roca fuerte;
conduce a la gente
y vence la fiera;

ama las ovejas
y sé diligente,
pues Cristo las quiere,
y el cuido te deja.

Del Reino en la tierra,
Pedro, eres regente,
superintendente,
de toda la Iglesia.