(Juan 6,35: Yo soy el pan de Vida. El que viene a mí jamás tendrá hambre; el que cree en mí jamás tendrá sed)
Señor, dame un abrazo
que me ate como un lazo
para que evite mi ausencia
pues con ella se desprecia
este divino contacto
íntimo, sublime y grato,
que me llena de tu esencia.
Falta grave: inasistencia
ante el Cuerpo y Sangre santo
de alguien que me ama tanto;
mía fue la negligencia.
Un examen de conciencia
hoy me lleva a hacer un pacto
y a cumplirlo ipso facto:
¡Contigo, la unión se aprecia!
Amén.
Amén.