(Lucas 1,45: Feliz de ti por haber creído que se cumplirá lo que te fue anunciado de parte del Señor)
Al Cielo es asunta María;
la ascienden el Padre y el Hijo
al alto divino cobijo
que por su labor merecía.
Misión cumplida, le dirían,
al recibir con regocijo
a quien su "hágase en mi" bendijo
cuando a su encargo asentía.
cuando a su encargo asentía.
Completa ahora es la alegría
al ver la Gloria de su Hijo
después de ese crucifijo
con que la salvación traería.
A ella yo quiero en este día
honrar, y mis loas dirijo;
y considerándome su hijo,
quiero llamarle Madre mía.