Bendita unción

(Juan 12,3: María, tomando una libra de perfume de nardo puro, de mucho precio, ungió con él los pies de Jesús y los secó con sus cabellos. La casa se impregnó con la fragancia del perfume)
Bendita unción en cansados pies;
para tu cuerpo preparación,
y de la tumba aproximación,
pues para tu hora, días, faltan seis.

Es tratamiento digno de un rey;
fina fragancia de la loción
y derramada con mucho amor.
¿Que cuesta mucho? ¡Pagas después!