En la paz del alma se distinguen las faltas propias

Frase de Fr. Ambrosio de Lombez
En un agua bien tranquila es posible distinguir hasta los más pequeños granitos de arena,
y en la paz del alma se distinguen sus más pequeñas faltas:
uno se ve a sí mismo tal como es,
se conoce a sí mismo y se desprecia,
pues conocerse y despreciarse son cosas inseparables;
de ahí nace la humildad,
que es el fundamento de todo el edificio interior.