Santa Virgen escogida,
de Dios Madre muy amada,
de Dios Madre muy amada,
en los cielos ensalzada
del mundo salud e vida.
Del mundo salud e vida,
de muerte destruimiento,
de gracia llena complida
de coitados salvamento
de aqueste dolor que siento
en presión sin merecer,
tú me deña estorcer
con el tu defendimento.
Con el tu defendimento,
non catando mi maldad
nin el mi merecimiento
mas la tu propia bondad;
que confieso en verdat
que so pecador errado;
de ti sea ayudado,
por la tu virginidad.
Por la tu virginidad
que non ha comparación,
nin hobiste egualdad
en obra e entención,
complida de bendición;
pero non só mereciente,
venga a ti, Señora, en miente
de complir mi petición.
De complir mi petición
como a otros ya compliste,
de tan fuerte tentación
en que só coitado triste;
pues poder has, e hobiste,
tú me guarda en tu mano;
bien acorres muy de llano
al que quieres e quisiste.