(Lucas 13,18 Jesús dijo entonces: ¿A qué se parece el Reino de Dios? ¿Con qué podré compararlo?)
De tu Reino soy,
porque me salvaste, Señor;
en tu Reino estoy,
por el Bautismo, Señor;
y a tu Reino voy
con tu auxilio, Señor.
Amén.
Amén.