Divino amor

(Del poeta español José María Zandueta Munárriz (1915-2005))
Señor Dios, tu ternura,
el amor sin igual con que nos amas
arde en tu corazón con vivas llamas.
No hay lazo, ni envoltura
que aplaque tanto amor, tanta dulzura.

Tu corazón divino
no se cansa de amarnos, de querernos.
Tus brotes de cariño son eternos.
Nos muestras el camino
y riges con amor nuestro destino.

¿Cómo podré pagarte
tanta benignidad y tanto aprecio?
Muy alta es tu bondad, muy alto el precio,
muy alto el estandarte
de tanto y tanto amor, que debo darte.

Señor, no tengo prisa.
Todo mi amor, en largo derrotero,
quedó a tus pies herido y prisionero.
Mi amor no se improvisa,
que sea un dulce beso, una sonrisa.