he de llegar a ti sin que sepas la hora.
Estate alerta, pues; vigila cada acción,
y lo que has recibido y escuchado memora.
Aunque nombre de vivo posees, estás muerto;
perfectas, ante Dios, no he encontrado tus obras.
Consolídalas pronto o han de morir por cierto,
si es que no te arrepientes y de otro modo obras.
Yo soy El de las siete estrellas a su diestra;
El que en los siete Espíritus de Dios, único, arde.
Vestirá el que venciere de blancas vestiduras.
Del libro de la vida, su nombre -santa muestra-
jamás he de borrar, lo diré en las alturas.
Vendré como ladrón: igual temprano o tarde.
Vendré como ladrón, de improviso o a oscuras.